ALABANZA AL DIOS CREADOR “Dios ama al que da con alegría”. (2 Cor 9) Autor: Pedro Sergio Antonio Donoso Brant
ocds Es bueno dar
gracias al Señor y tañer para tu
nombre, oh Altísimo, proclamar por la
mañana tu misericordia y de noche tu
fidelidad, con arpas de
diez cuerdas y laúdes, sobre arpegios de
cítaras. Tus acciones,
Señor, son mi alegría, y mi júbilo, las
obras de tus manos. ¡Qué magníficas
son tus obras, Señor, qué profundos tus
designios! 7El ignorante no
los entiende ni el necio se da
cuenta. Fragmento del Salmo 91, Laúdes, sábado, 4ª semana. “Es
bueno dar gracias al Señor”. Dios es digno de ser alabado siempre, como del
mismo modo debemos hacer ver a los demás su grandeza para con sus fieles por
la mañana y por el anochecer. El Señor nos ha mostrado tantas veces su mano
caritativa y compasiva a pesar de que
no siempre tenemos grandes meritos para que El sea tan magnifico con nosotros.
Por todo ello, nos satisface hacer una y mil alabanzas al Dios creador. “Proclamar
por la mañana tu misericordia, y de noche tu fidelidad”. Con la llegada
del alba, miremos al cielo en oración lleno de gratitud por el día que viene.
Por la tarde, ya ido de nuestros ojos el sol, cuando ya sentimos la necesidad
del descanso, en la tranquilidad del fin del día, busquémosle a EL en la
santa oración para contemplarlo, dialogar con El y agradecer su confianza. “Tus acciones, Señor, son mi alegría, y mi
júbilo, las obras de tus manos”. Se que hay personas que piensan que todo
lo que tenga que ver con la fe, es sinónimo de seriedad y tristeza, pero se
equivocan. La alegría, aunque serena, es profunda y permanente y esta proviene del descubrimiento de Dios en sus
obras y de la obra que va haciendo en nosotros. Su exquisita misericordia, su
amor inmenso, nos descubren a cuantos hemos sido regalados “con toda clase de
bendiciones espirituales, en los cielos, en Cristo” (Efesios 1, 3). Entonces como no expresar con alegría: ¡Qué magníficas son las obras del Señor!,
¡qué profundos tus designios!”. Dios nos muestra un rostro alegre y
nosotros queremos vivir una alegría gozosa, por estos y otros muchos motivos le
damos gracias de todo corazón por su don inefable; por habernos bendecido y
“elegido de antemano para ser sus hijos adoptivos por medio de Jesucristo,
según el beneplácito de su voluntad. (Efesios 1, 5). “El
ignorante no los entiende, ni el necio se da cuenta.” Ciertamente no nos
cabe a veces en el entendimiento, de que algunos no se den cuenta de las
obras que hace Dios, entonces nos preguntamos:¿Que pasa en el corazón del
hombre incapaz de comprender que todo lo bueno viene de Dios?. ¿No comprenden
que el éxito transitorio lo hace arrogante?, ¿la soberbia y la vanidad no les
alcanza para darse cuenta que la realidad que viven es frágil?, el éxito
siempre es efímero. Con todo Señor, te alabamos por tu generosidad por que
“haces salir el sol sobre malos y buenos, y llover sobre justos e injustos.”
(Mt 5,45). Es así también como elevamos nuestra oración por los que ante el
fracaso de una vida sin Tí, aprendan algún día a
reconocer Tu solemne y grandiosa figura de Dios y sepan gozar que tu solo nos
traes bienestar y alegría. Por comprender todo esto, “Gracias Señor” Pedro
Sergio Enero 2011 |